20.12.16

El bolero políticamente correcto


2a. quincena, diciembre 2016



Tenía ya casi decidido no actualizar el blog con la extensa emisión que tuve el placer de compartir en El Opio de las Masas, cuando el sueño que se apodera de los dormideros, gracias a la sustancia que Marx identificó con la religión, ganó desde las páginas de La Diaria mis incrédulas pupilas. Allí se publican las desventuras de una militante generacional defraudada por la regulación normativa. Se plañe el fracaso políticamente correcto, incluso cuando el amor a la norma ha sido inspirado por la movilización en la calle. Los militantes de la “agenda de derechos” habrían sido boicoteados por “abogados y doctores”.1 Incluso si no se llega a distinguir que diferenciaría a un abogado de un doctor, conviene no detenerse en menudencias institucionales, pese a que pensándolo mejor, uno pueda percibir que lo institucional y la abogacía no se encuentran tan distantes entre sí, ni respecto a una “agenda de derechos”. Advierte el relato la frustación de una generación que hizo realidad, al fin de cuentas, lo que el Frente Amplio suponía pero quizás no quería acometer desde el gobierno. La misma camada militante podría verse llamada al desengaño político, se desliza incluso, a la desistencia electoral, yendo por la vía del despecho ideológico. Se entona un bolero políticamente correcto, ante normas que correctamente insufladas al Estado se desinflan, una vez aterrizadas en la vía pública. El sentimiento políticamente correcto del bolero dice, desengañado de un Frente Amplio al que se dijera Nosotros:


Atiendeme, que quiero decirte algo, 
que quizas no esperes, 
doloroso tal vez.  

escuchame, 
aunque me duele el alma, 
yo necesito hablarte 
y así lo haré

Nosotros, 
que fuimos tan sinceros, 
que desde que nos vimos,  
amandonos estamos. 

Nosotros, 
que del amor hicimos, 
un sol maravilloso, 
romance tan divino.  

Nosotros, 
que nos queremos tanto, 
debemos separarnos,  
no me preguntes más. 

No es falta de cariño, 
te quiero con el alma,  
te juro que te adoro, 
y en nombre de este amor 
y por tu bien te digo adiós.  

Nosotros, 
que nos queremos tanto, 
debemos separarnos,  
no me preguntes más.  

No es falta de cariño, 
te quiero con el alma,  
te juro que te adoro, 
y en nombre de este amor 
y por tu bien... 
... te digo adiós... 2

Ensoñado tanto por el bolero como por el dormidero ideológico, buscando el placer que según se dice procura el Opio a las Masas, cedo a la tentación de pensar que una prolongada entrevista no es nada, en extensión ni en intención, comparada con el desaliento que cunde desde ya entre una militancia traicionada por el poder. Versando sobre Trump, el pasado de Fidel y el presente de Vázquez, la conversación que mantuve, quizás ya entre falaces y placenteras ensoñaciones, con El Opio de las Masas, no deja de incorporar lo “políticamente correcto”, incómodamente zarandeado por el ronquido filosófico.

En el link se encontrará, junto con el olvido del ingrato presente, la ensoñación francamente deliciosa de un Estado imposible http://elopiodelasmasas.tk/temporada-6-programa-31-la-politica-como-sistema-de-signos/



1Napiloti, R. “Regulación irresponsable”, La Diaria (19/12/16) http://ladiaria.com.uy/articulo/2016/12/regulacion-irresponsable/
2 Eydie Gormé y Los Panchos, “Nosotros” https://www.youtube.com/watch?v=qirS5sGLWlM